Se deben de incluir en su nutrición verduras, frutas, cereales como avena, tortilla, pasta; leguminosas como lentejas, frijol y habas; alimentos de origen animal bajos en grasas que proporcionan proteínas como pollo y pescado; las grasas buenas que se encuentran en el aguacate, cacahuates y almendras; y mantener la hidratación a base de agua natural.