Fatiga crónica reduce 40% de productividad

El cansancio constante reduce la capacidad de concentración, disminuye la eficiencia y aumenta el riesgo de errores y accidentes El síndrome de la fatiga crónica es un problema de salud cada vez más común que afecta a millones de personas, especialmente en el ámbito laboral.

Este padecimiento, también llamado ‘encefalomielitis miálgica’, caracterizado por un cansancio extremo que no se alivia con el descanso, tiene un impacto profundo en la productividad y calidad de vida.

La fatiga crónica afecta principalmente a adultos jóvenes y de mediana edad, siendo más común en mujeres.

En México, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 20 por ciento de los trabajadores sufre de algún grado de fatiga crónica, impactando gravemente su desempeño laboral y bienestar personal.

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El cansancio constante reduce la capacidad de concentración, disminuye la eficiencia y aumenta el riesgo de errores y accidentes. Empresas reportan hasta un 40 por ciento de reducción en la productividad de empleados que padecen fatiga crónica, lo cual se traduce en pérdidas significativas.

Aunque no está oficialmente reconocida como una enfermedad laboral, la fatiga crónica está estrechamente vinculada a condiciones de trabajo exigentes y a entornos laborales con alta presión.

Los síntomas pueden llevar a un absentismo laboral frecuente, una disminución del rendimiento y, en algunos casos, la incapacidad para trabajar.

SÍNTOMAS DE LA FATIGA CRÓNICA

• Cansancio extremo y persistente.
• Dificultad para concentrarse.
• Dolores musculares y articulares.
• Problemas de memoria.
• Insomnio o sueño no reparador.
• Dolor de cabeza.
• Depresión y ansiedad.

RECOMENDACIONES

• Consulta médica: La fatiga crónica debe ser diagnosticada por un médico especializado, generalmente un internista o un neurólogo.
• Hábitos saludables: Mantén una dieta equilibrada, ejercicio regular y asegúrate de dormir bien.
• Gestión del estrés: Practica técnicas de relajación como la meditación o el yoga.
• Ambiente de trabajo adecuado: Asegura que tu lugar de trabajo tenga buena iluminación y ventilación, y toma descansos regulares.
• Buscar apoyo social: Unirse a grupos de apoyo para personas con fatiga crónica puede brindar compañía y comprensión.

CAUSAS POSIBLES

• Infecciones.
• Cambios en el sistema inmunitario.
• Estrés físico o emocional.
• Cambios en la forma en que las células del cuerpo obtienen su energía.
• Genética: En ocasiones, la enfermedad puede ser hereditaria.

ESTADÍSTICAS

• Solo el 20 por ciento de las personas con fatiga crónica son diagnosticadas correctamente.
• 10 años se puede reducir la esperanza de vida de quienes la padecen.
• 40 por ciento de reducción en la productividad de empleados que padecen fatiga crónica.

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