¿Cree Usted que es suficiente para planear y proyectar políticas de gobierno que los datos de salud, pobreza, mortalidad y movilidad sean consistentes en al menos los últimos 20 años? ¿cree Usted que lo son en México? En México no contamos con series de datos consistentes en nuestros años de independencia en temas como: exportaciones, empleo, enfermedades, etc. La falta de información homogénea afecta a todos y genera grandes costos.
A principios del siglo XIX en México los esfuerzos para recopilar e integrar datos fiscales, estadísticos y geográficos fueron diversos. Entre ellos los trabajos de Alejandro de Humboldt, Miguel Lerdo de Tejada y Simon Tadeo Ortiz de Ayala. A finales de siglo fue creada la Dirección de Estadística que integró en diversas publicaciones la información. Un ejemplo de la inconsistencia en datos se observa en las exportaciones, las cuales utilizaron diferentes unidades de medición como: kilos, libras, quintales y arrobas. Aunque Usted no lo crea hay otros datos vitales para crear políticas públicas con la misma problemática.
Crear registros consistentes de indicadores conocidos representa retos y problemas, la movilidad es uno mayor. La movilidad está relacionada con el empleo, la salud y la seguridad. Los datos para medir un área urbana deben considerar técnicas para crear registros útiles en diversos momentos, lugares y evitar la no consistencia como en las exportaciones de los últimos 200 años. Una lección es crear datos básicos comparables en el futuro como: colonia, calle, banqueta, bache, socavón, etc. Por ejemplo hay banquetas de 30 centímetros o de 2 metros, ambas intransitables. La longitud no es un factor de calidad de banquetas pero puede orientar la decisión de invertir provocando un desperdicio.
Podemos observar que en algunas ciudades generan registros, datos y métricas diversas las cuales no son similares a las utilizadas en otros municipios ni comparables con las utilizadas en otros lugares en el mundo. De no seguir técnicas para crear registros comparables, mucho del gasto en medición será inútil ya que los datos no podrán ser utilizados para evaluar las políticas públicas. Si queremos la eficiencia en el gasto gubernamental se requiere información confiable soportada en datos consistentes que puedan ser “re-utilizables”.