Seguimos en época de futbol americano, y para cerrar la temporada colegial, la semana pasada la Universidad de Alabama se llevó nuevamente el Campeonato Nacional, usando un mariscal de campo de primer año en remplazo de su titular. Viniendo de atrás el genio Nick Saban volvió a llevar al Crimson Tide al título.

Alabama sumó su título número 17, y el quinto en nueve temporadas, y es el equipo más exitoso de la época moderna, pero con el crecimiento de otras escuelas y la salida de jugadores que pasan a la NFL o simplemente terminan su carrera; el mérito de Saban es el de mantener al máximo su nivel por casi una década.

Saban llegó en 2007. Antes de eso ya llevaba 35 años como entrenador, incluyendo pasos fugases por Houston, Cleveland y Miami en la NFL. A los Dolphins llegó tras ganar su primer título colegial con LSU. Por su parte, Alabama, tras una gran década de los 70, desde 1979 solo había ganado un título en 1992.

La llegada de Saban fue acompañada por un contrato millonario y un objetivo de hacer al Tide un equipo grande de nuevo, la labor de reclutamiento fue enorme, con Saban tomando parte activa y miles de prospectos de preparatoria sueñan por ser dirigidos por él.

En su primer año apenas ganaron siete partidos, pero desde entonces los números de Alabama son siempre de doble dígito en victorias, aun estando en la conferencia más complicada, el SEC. En 2009 llegó el primer título, de manera invicta Alabama le pasó por encima a Texas en la final, en 2011 Alabama se recuperaría de perder con LSU, para vencerlos en la final 21-0. Un año más tarde aplastarían en la definición por el título a Notre Dame, y en los últimos tres años llevan tres finales, ganando una y perdiendo una con Clemson, y ganando de forma agónica a Georgia para ganar el título esta temporada.

A Saban ya se le considera el mejor entrenador colegial de la historia, es el único en ganar títulos con dos universidades y logra siempre renovar jugadores, la labor más complicada en la NCAA. Solamente Oklahoma y Ohio State se han mantenido en lo más alto por tantos años, por esto tienen a casi 50 egresados en la NFL, números increíbles cortesía de Saban, quien a los 66 años parece tener aún varios años al frente del equipo.