Ahora, cuando el mundo voltea hacia Estados Unidos, ‘suena’ una canción triste
Bret Stephens
El momento es la década de 1980. El lugar, el mar de la China. Un marinero a bordo del portaaviones USS Midway detecta un bote agujereado repleto de personas que huyen de la tiranía en Indochina. Mientras ayuda a los refugiados desesperados a resguardarse, uno de estos le grita: “Hola, navegante estadounidense; hola, hombre libertad”.
Este es el tipo de historias que a los estadounidenses les encanta oír. Les gusta tanto que, de hecho, Ronald Reagan contó esta anécdota en su discurso de despedida en 1989, como una manera de resaltar lo bien le había ido a Estados Unidos cuando, en sus palabras, “permanecimos firmes, nuevamente, por la libertad”.
Ya no es así. Ahora, cuando el mundo mira a Estados Unidos, entona una canción triste. Adiós, Estados Unidos. Adiós, hombre libertad. Ese en general es el aprendizaje a la catástrofe regional que ha sido la retirada de Donald Trump en Siria. El presidente argumentó su caso, como suele hacerlo, en una serie de tuits publicados esta semana. Como su autor, los tuits fueron en ocasiones pedantes, engreídos, destructivos e impertinentes.
Elogió a los kurdos como “gente especial y fantásticos combatientes” a los que “no hemos abandonado de ninguna manera” y, aun así, los abandonó. Elogió a Turquía, porque “fue fácil tratar con ellos” y por haber sido “un miembro importante y con buena reputación de la OTAN”, tras amenazar al país de “destruir y eliminar por completo” su economía si hacían algo que no le gustara.
Se jactó de que “¡las estúpidas guerras interminables se acabaron para nosotros!”, pero dio el paso que con mayor probabilidad acelerará su reanudación y expansión.
Además, se felicitó a sí mismo por su “gran e incomparable sabiduría”. Por supuesto. El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Yavad Zarif, cuya evaluación de los resultados de la retirada estadounidense fue más acertada, dijo de Estados Unidos que “es inútil buscar su autorización o depender de ellos para la seguridad”.