Esta semana que concluye se conmemoraron los 492 años de la fundación de la Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Santiago de Querétaro, esto según la tradición tan arraigada en el pueblo, misma que nos remonta al acontecimiento legendario de la aparición de la imagen del apóstol Santiago y de la Santísima Cruz en el Cerro del Sangremal en medio de un eclipse de sol y en pleno combate entre españoles e indígenas.
No es la intención de entrar en los detalles de este acontecimiento que desde siempre le ha dado identidad a la ciudad capital del nuestra Entidad Federativa, ya que va de la mano con la tradición de la fundación de San Juan del Río; lo que si es cierto es que gracias a esos relatos, los queretanos y los sanjuanenses, por así decirlo, tenemos una acta de nacimiento, aunque no de manera física, pero si de una manera “sentimental” y de ahí la importancia de la celebración del día 25 de julio, que por cierto, coincide con la celebración del apóstol Santiago el Mayor, Patrón de España y de todos sus territorios.
Sin embargo, lo importante, es la identidad como queretanos, la identidad que tenemos de pertenecer, en este caso a Querétaro, de ser parte de esta gran y bendita tierra, la cual está llena de historia, de cultura, de tradición, de progreso y de mujeres y hombres que han dado su vida por estas tierras.
Hablar de Santiago de Querétaro, no es solo hablar de sus personajes, de sus edificios, de sus historias, de sus lugares, hablar de Santiago de Querétaro, es hablar de la ciudad que nace en el siglo XVI y que en pleno siglo XXI sigue en un crecimiento constante. Es hablar de las personas que a diario se esfuerzan por una gran ciudad, que es la casa común de cientos que personas que han nacido o han escogido ese lugar para vivir.
Pero también es hablar de una ciudad con problemas y con situaciones que se deben de enfrentar a diario para buscar una ciudad más digna y una ciudad que corresponda a lo que desea cada uno de sus habitantes.
Así se presenta Santiago de Querétaro, ya a vísperas de la celebración de los quinientos años de su fundación y siendo el reflejo de un gran estado que es orgullo de México. Santiago de Querétaro es sin duda, un gran lugar para sentirse orgulloso y un gran lugar para vivir. Felicidades por estos primeros 492 años de vida.
MT