El 5 de febrero siempre será una fecha muy significativa para Querétaro
Iván Torres
No solo porque fue aquí, en el Teatro de la República, donde se firmó la Carta Magna que hoy rige los destinos de nuestro país en términos de soberanía y orden de las obligaciones del Estado con la sociedad mexicana.
Fue esta fecha que se escogió para la inauguración de uno los estadios más bellos de la época. Nuestro flamante y vigente Estadio Corregidora de Querétaro. El nombre se dio a través de un concurso convocado por el Gobierno en turno de Rafael Camacho Guzmán y fueron seis ganadores los que pensaron en ponerle este nombre: Jesús Ruiz Acosta, Óscar Jiménez Tejeida, Alicia Olvera Sánchez, Armando Torres Becerra, Ignacio Martínez López y Alejandro Cabrera Ruiz.
Una obra arquitectónica que desde su concepción llevó un deseo creciente de grandeza, que puso en el mapa a Querétaro cuando llegó la confirmación de que sería sede de la Copa del Mundo de 1986.
Inaugurado hace 35 años, en una fecha como esta, tuvo invitados de lujo, en la cancha, la selección mexicana que pisó por primera vez territorio queretano ante su similar de Polonia, selección que había sido tercer lugar en el Mundial de España 1982.
En la tribuna, ni más ni menos que el presidente de México, Miguel de la Madrid y el mandamás de la FIFA, Joao Havelange, y sus secuaces (del brasileño, no del mexicano, bueno, de ambos).
Fue un día soleado, martes, las tribunas lucieron repletas desde las 10 de la mañana. Marcando las 12 en punto, ambas selecciones salieron al terreno de juego. Después de un emotivo himno nacional cantado por los 45 mil aficionados presentes, se oyó el silbatazo inicial de Jorge Alberto Leanza.
Bastaron ocho minutos para que la catarsis soltara rienda con la algarabía que se produjo en el primer gol del partido, inolvidable. Segundos antes, se había marcado una falta por la izquierda a favor del equipo tricolor, cerca de la esquina del área grande, se acercó en solitario Tomás Boy para ejecutar, el entonces jugador de Tigres, ubicó la pelota y cuentan que le pidió al central que le ubicara la barrera polaca un poco atrás de lo normal.
De pierna derecha, hizo un cobro magistral que se anidó en el ángulo superior derecho.
El grito de gol se escuchó en todo el orbe. A 35 años el Estadio Corregidora es un emblema de Querétaro que puede contar el pasado y el presente de nuestro estado y nuestra ciudad.
AMIP.
