Por: Liz Durán
@LizzDurann
Se ha comentado sobre la importancia de dotar a las ciudades de políticas públicas de manera compartida, y que la ciudadanía a nivel local, nacional las entienda.
Referente al cambio climático poco se realizan para que este conocimiento llegue a la población. Estamos hablando desde escuelas, centros de trabajo, en la calle, y hasta en la casa.
Son dos siglos en los que la revolución industrial ha explotado los combustibles como el petróleo y el carbón para dar paso al ‘progreso’ en el mundo.
Pero… ¿Por qué eternamente? Existe un ‘pero’, y eso nos ha traído como consecuencia que el calor del sol entre en la atmósfera, pero que no salga y por ende la temperatura del planeta suba en las últimas décadas. Es decir, el humano progresa. A costa de su salud.
Si se tuviera la intención de mejorar nuestro ambiente, tendríamos que aplicar una política pública para educar desde las aulas, y en las empresas, para, al menos, comenzar todos a empujar al planeta a recuperarse de este último siglo.
Otro factor preocupante es que Gobiernos de países emergentes no apoyan la ciencia, y menos la difunden. Además, los medios no se han tomado en serio el propagar la ciencia, ni descubrimientos para mejorar el medioambiente, menos las intenciones positivas de personas que a diario son activistas por un medioambiente sostenible.
Las personas que mediante acciones visibilizan a peatones, ciclistas, usuarios de transporte públicos no los vea como ruidosos, son personas que han visto que se deben ofrecer mejores opciones de movilidad para que la ciudad sea vivida y disfrutada, pero a veces esto no se entiende. Lo que se visibiliza se puede cuantificar en términos de salud, medioambiente, y economía, por lo mismo que el conocimiento y datos se debe compartir para que toda la población se involucre.
Siempre comparto: somos muchos y seremos más. No esperemos a que sigamos todos con nuestras comodidades para movernos, consumir o desechar. Hay límites y los estamos sobrepasando, por no cuantificar los daños. Con información certera, todos tenemos el poder para cambiar nuestro rumbo.