Fernando Islas
Las pláticas que se dan en las universidades, los centros de trabajo, la sobremesa de la casa y otros espacios de convivencia, van enfocados a la alza de precios en los productos que día a día consumimos. Sin embargo es de vital importancia el mencionar que la situación económica actual es consecuencia de dos años de pandemia que azotaron la economía mundial en todos los sentidos.
Ante este escenario el Gobierno de México, que encabeza el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha decidido tomar diferentes acciones para que el impacto a los bolsillos de las y los mexicanos sea de menor magnitud. Entre ellas brindar garantías de acceso a productos de la canasta básica a precios accesibles para más de 22 millones de habitantes y lo equivalente a 25 mil tiendas de todo el país. Para muestra basta observar la meta que existe de producir más de 800 mil toneladas de maíz a finales de año o las 187 mil toneladas de frijol que están siendo y serán distribuidas a la mitad de su precio real.
Junto a la leche, los productos anteriores y otro más siguen siendo priorizados en su adquisición para continuar con la política de López Obrador, en la que cimenta su filosofía de gobierno donde impera que los que menos tienen son prioridad. La realidad es que siguen pendientes varios aspectos en la lucha por la dignificación de la vida pública nacional, pero poco a poco vamos avanzando con una política que ahora si nos incluye a todas y todos.