El tema de ciudades inteligentes (‘smart cities’) no es solo pensar en tecnología; es hablar de una gestión inteligente de las ciudades, donde no debemos perder de vista la sostenibilidad como requisito indispensable. Pero, ¿qué debe cumplir una ciudad para ser considerada ‘smart city’?
No existen requisitos específicos que definan a una ciudad como inteligente; sin embargo, si nos referimos a un desarrollo económico, social, urbano y del medioambiente con ahorros de energía y menor contaminación como características, podemos decir que alguna de ellas se debe implementar, para cumplir como tal:
• Tener clara la prospectiva de ciudad que se desea para el futuro.
• Gestión eficiente y sostenible de los recursos de la ciudad (energía, agua y medioambiente).
• Mejorar la movilidad, el trasporte y la accesibilidad.
• Trabajar con transparencia y un verdadero acceso a la información de la gestión de Gobierno.
• Desarrollo económico y competitivo basado en la innovación.
• Conservar y proteger el medioambiente.
• Garantizar eficacia y eficiencia de servicios urbanos.
• Integración tecnológica de sus infraestructuras.
• Colaboración entre la administración pública y los ciudadanos.
• Incrementar la calidad de vida de la población.
El concepto inicial se ha ramificado en varios subsistemas especializados para las ciudades del futuro, como las redes de distribución eléctrica eficientes ‘smart grids’, las mediciones de gasto energético digital ‘smart metering’; arquitectura optimizada y autosuficiente ‘smart buildings’; sensores que mantendrán la ciudad conectada ‘smart sensors’ y la e-Mobility, basada en la circulación eficiente e inteligente.
Es evidente que las ciudades del futuro están más próximas de lo que imaginamos y es esencial que empresas y profesionales se formen en generación sostenible, ahorro energético, nuevas tecnologías y construcción sostenible, para aprovechar nuevas oportunidades de negocio y absorber los miles de empleos que las ‘smart cities’ generaran en todo el mundo, en donde los paradigmas formen parte de la armonía de la naturaleza.