Estrella Rojas

La principal función del Estado es garantizar la existencia de un estado de derecho, es decir, que se cumpla la ley, pues en ello va implícito que se garantice la protección a la vida, la libertad, la propiedad privada, la educación, la seguridad, salud, e implica que, en caso de que cualquiera vulnere nuestros derechos, el Estado sancionará al agresor y buscará una reparación del daño a la víctima.

Cuando el Estado, el gobierno, no logran cumplir con estos fines, podríamos encontrarnos ante un Estado fallido, un Estado que no sirve.

Si una entidad federativa no pudiera garantizar los derechos de su ciudadanía, el artículo 76 de la Constitución faculta al Senado a desaparecer su poderes, para nombrar un gobierno provisional que garantice el estado de derecho.

La ley que reglamenta esta facultad, señala que para la procedencia de la desaparición de poderes se deben dar algunos de estos supuestos: Quebranten los principios del régimen federal; abandonen el ejercicio de sus funciones; estén imposibilitados físicamente para el ejercicio de sus funciones; prorroguen su permanencia en sus cargos, o promuevan una forma de gobierno distinta de las fijadas en nuestra Constitución.

Cuando hablamos de desaparición de poderes, implica que, ante la falla de unos de sus Poderes, los otros Poderes locales no tuvieron la fuerza institucional para resolverlo. Por ello, no sólo se destituye al Gobernador, también se destituyen a los diputados y deshabilitan a los integrantes del Poder Judicial.

El caso es que, el estado de Guerrero, con una historia de violencia, pobreza e impunidad, llegó en días recientes a una crisis grave, que ha dejado en total indefensión a la ciudanía y que ha dejado a varios municipios a merced de la delincuencia.

En medio de ello, están las protestas de estudiantes por la impunidad que persiste en el caso Ayotzinapa, que llegó a un punto crítico, ante un homicidio de un joven que protestaba, a manos de la policía guerrerense.

Por ello, se planteó en el Senado la desaparición de poderes en Guerrero. Desde luego polémico, los legisladores de Morena, protegiendo a su gobernadora, lo rechazaron y amenazaron con desaparecer los poderes en estados donde gobierna el PAN, no por proteger a los ciudadanos, sino como una venganza política.

En este debate, encontramos que según Morena existen muchas más entidades federativas que están al borde del estado fallido, lo cual nos lleva a pensar en la situación que tiene el país entero en este sexenio, donde se han incrementado los delitos graves como los homicidios, secuestros, extorsiones y que, en respuesta, los criminales reciben abrazos.

Es verdad que entre los puntos requeridos para que aplique la desaparición de poderes no hay uno que tenga la claridad sobre lo que sucede en Guerrero o en otros estados, pero el Senado no puede ser omiso ante una crisis de este tamaño, los guerrerenses no lo merecen.