En cuanto al salario diario asociado a asegurados del IMSS por sector (expresado a pesos para el periodo julio 2018-2020), se aprecia una disminución mensual de -4.4%, manteniéndose una variación anual positiva de 9.9%.
Andrés Peñaloza
En rigor, la recuperación de empleos formales en el sector privado inició en julio pasado. Los trabajadores asegurados con salario asociado, que representan 99% de los asegurados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), se incrementaron en 16 mil 835 respecto del mes pasado, variación mensual positiva de 0.1%. De no haber rebrote pandémico es posible revertir, en lo que resta del año, el millón 111 mil 888 de empleos perdidos entre marzo y junio en este segmento, cuya caída en comparación anual es de 4.4%.
Respecto al otro segmento de afiliados al IMSS, equivalente a 1%, el de trabajadores asegurados sin salario asociado, la merma de plazas se concentró en julio (-20 mil 742, variación mensual de -15.1), y se debe a caídas de carácter estacional por lo que la emergencia sanitaria no es la causa principal. Cabe indicar que en este segmento de trabajadores están agrupadas las modalidades de aseguramiento 30 (productores de caña de azúcar), 35 (patrones personas físicas con trabajadores a su servicio), 43 (incorporación voluntaria del campo al régimen obligatorio), 44 (independientes) y, cuyo salario registrado no es el de un ingreso real percibido sino el de un salario referencial e igual a un salario mínimo.
El pasado 23 de agosto el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que se han recuperado 66 mil 734 plazas, de manera que es probable que agosto cierre con un saldo positivo de 90 a 100 mil plazas. Desde luego, se trata apenas de una décima parte de la cesantía acumulada por lo que en los meses ulteriores deberá acrecentarse el ritmo de creación de empleos formales.
En materia salarial, los 126 mil 249 empleos generados se registraron en los rangos salariales bajos (hasta dos salarios mínimos, 54%) e intermedio (más de 5 y hasta 10 salarios mínimos, 46%). Mientras que la cesantía continúo con 109 mil 414 plazas en el resto de los rangos. El más afectado fue el de los trabajadores que ganan más 2 y hasta 3 salarios mínimos con 40%; seguido de los ubicados en los umbrales de más de 15 salarios mínimos y aquellos ubicados en más de 3 y hasta 4, con 28 y 24%, respectivamente. Conforme ocurra la reactivación económica se podrá apreciar si se trata de reingresos de trabajadores o al cambio de puestos existentes a salarios más bajos o una combinación.
Salario base de cotización
En junio el salario base de cotización promedio de los trabajadores inscritos en el IMSS fue de 407.28 pesos diarios (381.55 pesos de julio de 2018); un incremento anual de 4.7% aunque menor al 5.1% observado el mes anterior. Durante la emergencia sanitaria el salario promedio y su crecimiento anual se han mantenido, en gran medida, por el efecto aritmético originado por la amplia eliminación de empleos con salarios bajos ocurrida desde marzo a junio. Empero, en julio el salario base de cotización fue de 405.20 pesos diarios y aunque en variación anual se incrementa 2.7% este es el más bajo desde febrero. Es posible que al recuperarse los empleos de salarios bajos y declinar los salarios altos, el salario promedio se reduzca. Si la inflación asciende respecto a su mínimo de abril, como ocurrió en julio, que fue de 3.62%, el poder adquisitivo se acotará.
En cuanto al salario diario asociado a asegurados del IMSS por sector (expresado a pesos para el periodo julio 2018-2020), se aprecia una disminución mensual de -4.4%, manteniéndose una variación anual positiva de 9.9%.
Salvo servicios sociales, que mostraron un alza mensual de 10.7%, el resto de los sectores tuvieron variaciones negativas; la más acusada fue registrada en la industria eléctrica y suministro de agua potable con -24.4%; seguida del comercio, con -8.6 y servicios para empresas y personas, con -7.7%.
Para construir una nueva normalidad con bienestar económico y social es menester dejar atrás el falso dilema de empleo a costa del salario. El reto es mantener el equilibrio entre generación de empleo y la recuperación del poder adquisitivo de las remuneraciones, como venía sucediendo en los meses anteriores al confinamiento.
El empleo formal del sector privado expresado en los asegurados al IMSS tocó fondo en julio. Agosto marca el arranque de la recuperación ocupacional. ¿Qué tan vigorosa será ésta? Deberemos estar atentos al repunte que se alcanzará entre septiembre y octubre, meses donde tendencialmente se expande desde un mínimo de 43% (2018) hasta un 336% (2019).