Los Blanchet/Caldo de Cultivo
La inversión productiva ha sido, y es, objeto de atracción para todas las economías libres del mundo. Países, estados y municipios compiten por ellas simplemente porque son detonadores de desarrollo y crecimiento económico, siempre y cuando se sujeten a las leyes locales y sean respetuosas con las costumbres, idiosincracia y medio ambiente del lugar en donde se establecen.
En cuanto a su origen, sí, la inversión ideal es la de procedencia nacional o local, la que en teoría, no se llevaría sus utilidades del país. Sin embargo, ésta normalmente es insuficiente para satisfacer las necesidades del mercado, de generación de empleos y de ingreso tributario, por lo que la inversión extranjera es bienvenida porque sus ventajas sobrepasan a sus inconvenientes. Entre sus ventajas destacan, además de las anteriores, el influjo de nuevas tecnologías y prácticas de negocios no conocidas en los países de destino y probadas en la práctica en sus naciones de origen, el desarrollo de la fuerza laboral, empresarial y de la competencia, traduciéndose todo esto en más y mejores opciones para el consumidor. Además, propician el desarrollo de infraestructura que, en cascada, resultará atractiva para la llegada de otros inversionistas.
Y pareciera que sólo los países en desarrollo se encuentran ávidos por recibir la inversión, local o extranjera. Estados y municipios de la Unión Americana compiten ferozmente entre sí para atraerlas, promoviendo sus ventajas comparativas como región.
Con la confianza de poseer un cúmulo de estas ventajas, Querétaro continúa atrayendo inversiones muy importantes en diversos rubros como el automotriz, el aeronáutico y el de las tecnologías digitales, entre otros. El gobernador Mauricio Kuri se encuentra en estos días, acompañado de funcionarios y líderes empresariales, en la feria industrial Hannover Messe de Alemania, en la que de inicio, ya amarró una inversión de más de 119 millones de pesos por parte de la germana SCHUNK y 222 millones más del consorcio ZF Group. Hace algunas semanas se anotó otra grande proveniente del gigante Amazon por 5 mil millones de dólares.
Por otro lado, en lo nacional, el gobierno federal presume nivel récord de inversión extranjera en el 2023 por 36 mil millones de dólares, sin duda, un dato positivo, aunque de alguna manera incomprensible, dado el ambiente poco amigable para la inversión en el país, -por decir lo menos-, en la actualidad. Habrá que analizarlo con detenimiento.
¡En toda!
El 22 de abril se celebró el Día Internacional de la Madre Tierra. Este llamado a cuidar de ella viene desde 1970, cuando millones de norteamericanos se manifestaron por un medio ambiente sano. El día fue establecido por la ONU hasta el año 2009 (hombre, que rápidos para hacer caso), y digamos que sólo se constituyó el día, porque de acciones verdaderas estamos muy lejos, y encima darle el tono de celebración… ¿Celebrar qué? Porque es claro que a este planeta, hasta hoy nuestra única casa en el Universo, lo hemos agarrado de campo de pruebas atómicas, somos máquinas imparables de contaminación y deforestación, no mostramos el mínimo respeto por la vida animal, y en el tema del agua, ya nos alcanzó el Mad Max.
Desde diferentes trincheras, a lo largo de varios años, se han realizado esfuerzos para intentar sanar todo el daño que le hemos propinado a la Naturaleza, pero sigue siendo una minoría en esta lucha. Son heridas tan profundas y de tantos años las que le hemos ocasionado, que como humanos, en un par de generaciones, no tendríamos la capacidad de restaurarlos, y la tierra como buena madre, llora en silencio, nos perdona todo y todavía nos sigue dando espacio para vivir.
He llegado a la conclusión de que los humanos nos parecemos a la araña Stegodyphus dumicola, originaria de Sudáfrica, la cual permite que sus crías la devoren, ya que nos hemos devorado a la madre tierra a placer y despiadadamente.
Qué terrible será el mundo para las generaciones que vienen o que van comenzando su camino, para no decir su supervivencia en este planeta. Siento pena por ellos. Sus servilletas, los Blanchet, vimos venir la catástrofe y desde un principio decidimos firmemente no dejar descendencia, no porque fuéramos unos Nostradamus región 4, sino que un poco de observación, sentido común y conciencia nos permitió anticipar lo que ya comenzó a manifestarse: sobrepoblación, cambio climático y crisis hídrica. Así que siendo vegetarianos por más de treinta años y no dejando más habitantes, con la Madre Tierra ya “copelamos”.
Para finalizar, quiero agradecer con todo mi amor a mi mamá, a quien escogí -y ella aceptó-, para que yo viniera de visita a este mundo. Doña Haydeé fue mi gran maestra de vida, quien con su chancla voladora y el tino más preciso, me enseñó el “por favor” y el “gracias”, y siempre me dijo que había que sonreír ante la adversidad. Mi mamuchis, desde hace dos semanas y media, regresó a la verdadera casa: el cielo. Hoy, ella es el ángel que con sus hermosas alas me protege del “malamén”.
Le esperamos hoy miércoles a las 9:00 de la noche en la KJeta por el Canal 10 de RTQ en señal abierta y de cable, y por streaming en rtq.mx. También le recordamos que tenemos una cita la próxima semana aquí…para echarnos otro caldito.
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